Para definir nuestra marca personal es importante visualizar nuestra vida, definir nuestros objetivos generales y fijarnos nuestras metas cuantificables y con una fecha fijada. La definición de la marca personal es un proceso más allá que un simple proyecto: es indefinido, es un trabajo que tendremos que hacer de forma recursiva para ir evolucionando y consiguiendo las metas que nos acerquen a nuestros objetivos.
Por lo tanto, no podemos pensar, que lograremos unos objetivos definitivos: en todo momento surgen nuevos objetivos y, si todo va bien, iremos reformulándolos de forma coherente con nuestra forma de ser y nuestra visión de vida. Cuando logramos los primeros objetivos fijados, si revisamos nuestra visión, veremos como tenemos nuevos objetivos para los que seguir trabajando.
Saber quién eres y qué haces
Antes de pensar en un futuro posible, un futuro ideal de lo que queremos ser y hacer, hay que pensar en lo que tenemos ahora. Y, especialmente, valorarlo. Tenemos que tener en cuenta que todo lo que tengamos actualmente es por alguna razón, y por alguna razón conseguiremos cambiar aquellas cosas que no nos gusten.
Por lo tanto, la primera fase de la definición de una marca personal es, sin duda, conocernos a nosotros mismos. Hay muchas maneras de hacerlo y no es el objetivo de este artículo definirlas, cada uno debe encontrar la mejor manera según su caso. Lo que sí es recomendable es escribirlo, dejar estas cosas por escrito nos ayudará a poderlo revisar tan a menudo como queramos y valorar más objetivamente la evolución que estamos haciendo.
Yo personalmente utilizo la metodología Getting Things Done, que organiza nuestras vidas según los niveles de altura, desde lo más básico (acciones físicas concretas) a lo más general (visión de la vida):
- 15.000 metros, la definición de nuestro estilo de vida, ¿dónde queremos llegar?
- 12.000 metros, objetivos a 3-5 años, el deseo se concreta en metas más allá del horizonte.
- 9000 metros, objetivos anuales o bianuales, es hora de tomar decisiones.
- 6000 metros, nuestras áreas de responsabilidad, todas las áreas a las que dedicamos recursos.
- 3000 metros, proyectos, nuestra perspectiva a medio plazo (semanas/meses).
- 0 metros, las próximas acciones a realizar, lo que nos ocupa y nos preocupa durante el día a día.
Define tu marca personal desde el ahora pensando en el futuro
Si quieres definir tu marca personal, seguramente primero quieras definir como quieres llegar a ser. ¡No! Así no vamos a conseguirlo. La marca personal sí debe estar definida por la forma en la que queramos llegar a ser percibidos por los demás, pero antes tenemos que tener claro cómo somos y cómo nos perciben actualmente.
Por lo tanto, lo mejor es empezar por tener claras todas las acciones que debemos hacer, pensar en nuestros proyectos (que en GTD se entienden como cualquier tarea que requiera de dos o más acciones físicas, algún día profundizaré en eso) y a partir de ahí iremos pensando en nuestros objetivos actuales, en qué áreas de responsabilidad se enmarcan y como afecta eso en nuestra visión de la vida.
Una vez hayamos hecho esto, lo mejor es hacer el procedimiento inverso. ¿Dónde queremos llegar? Volveremos a definir nuestra visión de vida para tenerlo claro, desarrollaremos esa visión para convertirla en una misión personal y extraeremos de ahí nuestras áreas de responsabilidad que nos permitan llegar dónde queramos. Cada área de responsabilidad deberá tener sus objetivos con metas concretas, que acabaremos reflejando en nuestros proyectos y acciones concretas.
Si de esta manera crees que a ti también te puede ir bien para saber quién eres, cómo eres y qué haces, te recomiendo empezar desde hoy mismo. Una vez tengamos claro toda tu situación actual, tocará seguir adelante con la definición de nuestra marca personal, pero eso es algo que trataré en algún artículo más adelante.
Imágenes | Esellee, jDevaun
1 comentario en «Saber quién eres, cómo eres y qué haces, fundamental para definir tu marca personal»