¿Ya te has quitado de la cabeza la gestión del tiempo? Sí, por si todavía no lo sabes, la gestión del tiempo no existe. Es un mito. No hay forma alguna de gestionar el tiempo. Siempre tendrás 24 horas al día, 7 días a la semana, 12 meses al año. Una vez te das cuenta de esto, ves la importancia de gestionar tu atención en vez de gestionar el tiempo.
Hoy quiero que aprendas a gestionar tu atención. Y para empezar a gestionar tu atención… ¿qué tal si aprovechas para dejar de gestionar el tiempo?
Muchas personas cuando quieren empezar a mejorar su productividad me dicen: ¡pero es que no tengo tiempo! Una vez más se centran en el tiempo.
No es cuestión de tiempo, sino de lo que quieras llegar a conseguir en tu vida. Especialmente, de a qué estés dedicando tu atención.
Si no eres productivo, nunca tendrás tiempo, pero en algún momento tienes que empezar, ¿verdad?
En este artículo voy a contarte cómo mejorar tu productividad dejando de gestionar el tiempo y pasando a gestionar tu atención.
3 pasos esenciales para gestionar tu atención
1. Analiza tu día a día, tus hábitos y tu forma de escoger qué haces
Si no tienes tiempo, la mejor forma de saber por qué es parando tu vida y analizándola. Es complicado, lo sé: cuando estás a tope, estresado, sin tiempo, lo que menos importante ves es parar y analizar tu vida, pero es lo que te permitirá dejar de estresarte y tener más tiempo para ti.
En ese sentido, una de las cosas que puede funcionarte es analizar durante varios días, incluso una semana, qué es todo lo que haces. Yo de vez en cuando lo hago, y apunto todo lo que hago en un documento con un tiempo aproximado de dedicación. Es un paso perfecto para conseguir cumplir con el punto 2.
2. Decide qué puedes quitar de tu vida, deja de lado las cosas que no sean importantes
Si tienes un listado de todo lo que has hecho durante varios días o durante una semana, siempre será mucho más fácil decidir qué puedes quitar de tu vida. Será tan fácil como revisar toda tu lista, pero tan difícil como decidir qué es lo que harás con cada uno de los puntos que tengas apuntados.
De forma general, si algo no es imprescindible en tu vida, intenta quitarlo del medio.
- Si no es importante, deja de hacerlo.
- En caso de que pudiera ser importante, si puedes, intenta delegarlo.
- Cuando no es responsabilidad tuya pero lo estás haciendo, ¡quítatelo de encima cuanto antes!
Reducir las cosas que haces en tu día a día es la única forma de conseguir tener más tiempo para ti.
3. Escoge un nuevo hábito productivo e impleméntalo en tu rutina diaria
Ahora has quitado muchas cosas de tu vida, pero si no cambias tu forma de ser, de actuar, de trabajar…, nunca vas a mejorar tu productividad y no gestionarás adecuadamente tu vida.
En ese sentido, un primer paso imprescindible es implementar nuevos hábitos productivos en tu rutina diaria, de forma que puedas ir mejorando poco a poco cada día.
¿Y con qué hábito empezar? Realmente da igual, lo importante es empezar con alguno. Si no se te ocurre por dónde puedes empezar, te dejo algunas ideas:
- Levantarte media hora antes, para hacer deporte, trabajar en un proyecto que te haga ilusión o simplemente leer un rato.
- Irte a la cama media hora antes, si lo que necesitas es dormir más y mejor.
- No llevarte nunca trabajo a casa: si hay algo urgente, gestiónalo antes de salir de la oficina.
- Hacer una revisión diaria, cada día un cuarto de hora antes de salir de la oficina, para preparar el trabajo que harás mañana.
¿Con qué hábito vas a empezar? Escoge uno, el que sea, y empieza cuanto antes.
4. Extra: repite, repite y repite
Implementar un hábito puede ser un gran cambio productivo, pero imagina si cambias dos, tres o cuatro hábitos en poco tiempo.
En cuanto hayas conseguido implementar el primer hábito, vuelve a lo mismo: analiza dónde estás perdiendo tiempo, quítatelo del medio y escoge un segundo hábito que te permita mejorar todavía más tu productividad.
En el artículo de hoy hemos visto un pequeño proceso de tres pasos para pasar de gestionar el tiempo a gestionar tu atención, quitándote del medio todo lo que no es imprescindible y empezando a implementar un primer hábito productivo.
Antes de acabar, como siempre, tienes que hacer la primera acción: decide cual será el primer hábito productivo que implementarás y deja tu respuesta en los comentarios. Recuerda que para que sea motivador debe ser algo lo más concreto posible.
Mi primer hábito será levantarme todos los días a las 7:00 y hacer 30 minutos de ejercicio (las primeras semanas haré solo 3 días para luego ir aumentando) y dejar de dormir la siesta…
¡¡María!! Eso son tres hábitos (levantarse a las 7h, hacer 30 minutos de ejercicio, dejar de dormir la siesta…).
Empieza con uno que sea lo más sencillo posible, por ejemplo, ir a la cama 15 minutos antes de lo habitual. Hazlo durante como mínimo dos o tres semanas y que sea solamente ese, sin añadir más complicaciones. ¡Luego nos cuentas! 😉
Quiero implementar como habito el dedicar 30 minutos a revision diaria y preparacion de la agenda para el dia siguiente, el horario sera de 7 a 7,30 de la tarde.El no hacer esto de forma habitual me crea mucha tension y desorganizacion.
Hacer la revision diaria
¡Buen día a todos! Yo el primer hábito que intentaré adquirir, como alguno de vosotros, es el de dormir siete u ocho horas. Tendré que luchar con años de noctambulismo, pero es que yo me levanto hacia las siete cuando no antes. Total, que me siento agotada a la mitad de la semana, lo que es uno de los primeros escollos para aumentar mi productividad. Intentar acostarme hacia las once va a ser todo un reto para mí. Gracias por tus consejos, Jordi.
Empieza con objetivos que sean fáciles de lograr. Por ejemplo, 10-15 minutos antes de lo que es habitual en ti.
Hola Jordi,
El primer hábito que quisiera implementar y de hecho lo he empezado esta semana, es la de Delegar Tareas. Por mas que me lleven poco tiempo alguna de ellas realizarlas o fueran complejas, debo tomar el hábito de no hacerlas yo, sino delegarlas y tomarme el tiempo que sea necesario para que a la persona que elija poder explicársela de modo tal que la próxima acción similar la pueda realizar esa misma persona con naturalidad.
Otro Hábito que me gustaría realizar es levantarme mas temprano, ya que aveces, cuando empiezo el día laboral, con lo que me encuentro son con urgencias únicamente y no puedo planificar nada.
un abrazo, Rubén
Genial Rubén, empieza primero por un hábito y cuando lo tengas incorporado a por el siguiente 😉
Antes de salir de trabajar dejar bien claro con que tarea me pondré al día siguiente.
Por las mañanas después de hacer esta tarea decidir dos tareas más que sean importantes para ese día.
Tengo tantos hábitos que quiero implantar … de momento elijo el siguiente: dedicar 15 minutos cada noche a organizar el día siguiente, marcando mis tres prioridades para ese día.
Ya hace unos días comencé a dejar en el trabajo, antes de sallir, un pequeño listado de «asuntos pendientes». Cada mañana al llegar, los leo y comienzo a trabajar. A veces invierto varias semanas en un punto pero cada día me voy dejando en el listado: primero, el asunto que estoy trabajando en ese momento y segundo, lo que tengo pendiente. A la vez que trabajo en algo que me lleva tiempo, puedo ir tachando algunas cosas pendientes que requieren poca inversión. Lo que no tacho, pasa para el día siguiente.
Una muy buena forma de empezar 🙂
Os cuento que acabo de instaurar un hábito: la primera hora de mi día me la dedico a mi. Cada día me levanto, desayuno, dejo a la peque en el cole y me voy a hacer deporte; después ya empieza el mundo laboral, pero he decidido que cada día, antes de empezar a trabajar, me voy a dedicar un momento a hacer algo «no productivo» pero que me satisfaga.
Y el próximo hábito que instaure va a ser: dormir un mínimo de 7 horas al día. Por tanto, si me levanto a las 7h…
El primer hábito que quiero implantar yo, es el de la revisión diaria, ya que siempre quiero hacerlo y nunca lo consigo, porque me dejo llevar por la vorágine diaria y cuando me doy cuenta es la hora de irme, y ahí la familia gana en prioridad.
Estoy dándole vueltas todavía a como implantarlo (ya sabéis que me gusta quejarme del agobio que llevo) pero poco a poco lo conseguiré.
Con respecto a mis compañeros, es echarle valor al asunto, ya que yo soy del club de los que nos levantamos a las 05:00 de la mañana para meditar, desayunar, estudiar un poco e irme al gimnasio a entrenar, al principio te caes del sueño, pero el cuerpo se acostumbra a casi todo, yo os recomendaría cenar un poco antes, sobre las 20 – 20:30 y acostaros sobre las 22:00 a más tardar, que es lo que hago yo.
Suerte y un abrazo para todos.
Como consejo, si quieres hacer la revisión diaria por la tarde, fíjate una hora concreta, ponte alarma y cúmplelo al 100%.
Como propuesta un poco distinta, ¿por qué no hacerla por la mañana, en vez de por la tarde? Según cuentas parece que por las mañanas lo tienes todo más controlado, no te costaría mucho encontrar 5-10 minutos para hacer la revisión.
El primer hábito que quiero implementar es levantarme un poco antes por las mañanas para poder salir a correr un poco. Habitualmente corro por las noches pero sin una rutina fija, ya que salgo cuando puedo (niños, tareas domésticas, etc…) y de esta manera quiero implantar una rutina que me permita establecer un hábito saludable como es realizar un poco de ejercicio cada día.
Define más y mejor Marcos: ¿levantarse un poco antes? ¿hacer un poco de deporte?
Intenta definir exactamente: levantarme a las 6.45h para correr 40 minutos, por ejemplo.
El primer hábito que voy a implantar será acostarme antes y si veo que descanso lo suficiente, me levanté antes también. A ver si de aquí al invierno logro consolidardo porque en épocas de frío cuesta más ¿algún consejo al respecto?
Consejo: definirlo mejor y hacerlo progresivamente. Si te vas a la cama (por ejemplo), a las 23h, puedes empezar proponiéndote que durante esta semana cada día irás a la cama a las 22.45h. Cuando pase la semana ya decidirás cuál es el propósito de la siguiente semana 😉